domingo, 15 de junio de 2008

Hablemos de Crisis

La señora Presidenta de la Nación, tan repudiada en estos días (y meses) expresó durante su último discurso oficial del 9 de junio, que no estamos viviendo una Crisis, que “crisis fueron los días fatídicos del 2001, 2002, 2003”.

Como aclaró el periodista Nelson Castro, en su programa de TN “El juego limpio”, una de las acepciones de la palabra CRISIS es la de CONFLICTO, según el Diccionario de la Real Academia Española. La Presidenta sí se anima a usar este término, pero no el otro.

Todos los ciudadanos y argentinos no dudamos en afirmar que estamos frente a una crisis. Los únicos que no comparten esta idea son el gobierno y todo su séquito peronista-kirchnerista (a esta altura, casi sinónimos). Estamos llegando al día 100 de esta CRISIS, que pareciera estar cada vez más lejos de una solución.

No podemos hablar de que el Gobierno se enfrente al campo, ya que evita hablar del tema públicamente. Por lo tanto, hablamos del Campo versus la Gente. Detrás, las delicadas manos de la Presidenta intentan hacerse ajenas al problema, como un “que se maten entre ellos”. Todos los que cortan las rutas, no entienden (o eso parece) que el gobierno no se perjudica. Tanto Cristina como sus soldados viajan en helicóptero, y tienen sus propias vacas para comer y ordeñar.

Una de las imágenes más impactantes (en lo personal, la peor) del conflicto es la de los camiones derramando leche en las rutas. Se arrojan más de 4.000.000 de litros por día. También es triste que a esta altura pensamos en que la represión es la única salida (como pasó la semana anterior en España y el Corte que realizaron los Camioneros). La violencia es siempre (y debe ser) el último recurso.

¿Qué están esperando? ¿Que diezme la población por hambre, por desabastecimiento de todo tipo de recursos? Es claro que el país no ha avanzado hacia ningún lado, o peor, que ha retrocedido tanto como su crecimiento.

El matrimonio presidencial se basa en el Principio Divino de “Yo te lo doy, yo te lo quito”. Si el señor Kirchner logró el crecimiento durante su presidencia, su sucesora y señora esposa puede tomarlo.

El Siglo XXI le guiña un ojo al país, que produce lo que el mundo pide a gritos de socorro: alimentos, petróleo, agua. Tenemos todos los recursos y gente capacitada, pero nos quedamos sin hacer nada. Incluso todo esto escasea dentro del propio territorio nacional. Y no es ignorancia lo que nos deja atrás.

Brasil y Uruguay han sabido aprovechar la oportunidad, tomaron el avión y se elevaron a miles de metros de altura con respecto a la Argentina. Y nos seguimos creyendo los mejores en todo, mientras el mundo se ríe de nosotros.

Los 50 y los 70 ya pasaron, es hora de dejar de pelear entre nosotros mismos, e intentar revertir la situación. No podemos esperar otra oportunidad, ésta puede ser la última.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que tal estimado amigo, ya que no tengo nada que hacer te dejo mi comentario con respecto del tema.
Para mi son dos sectores con mucho poder sumidos en una pelea por demostrar quien tiene más poder, y por supuesto los perjudicados siempre son quienes no tienen poder, o sea nosotros.. y a ninguno de los dos le importa si la población tiene problemas, esto está bastante claro.